Rafael Zaga es citado con su abogado extraoficialmente por un tercero (sin citatorio ni documento oficial alguno) a las oficinas del fiscal general de la República quien le informó que la Fiscalía sospechaba los 5 mil millones de pesos que Telra Realty habían sido recibidos de forma irregular y que, por lo tanto, tendría que regresarlos en el plazo de una semana o de lo contrario él y su familia serían perseguidos con toda la fuerza del Estado. Aún bajo esa amenaza, Rafael le comunicó al Fiscal su intención de defenderse.